Las consejerías de Fomento y Educación de la Junta de Castilla y León tienen previsto ampliar los servicios compartidos de autobús entre las líneas regulares y el transporte escolar hasta alcanzar las 200 rutas durante el próximo curso 2015-2016. La cifra, que supone 120 recorridos más que los actuales, seguirá incrementándose en los próximos ejercicios para llegar a los 600 itinerarios en 2018 y los 1.200 a partir de 2019.
Para José Antonio Cabrejas, director general de Transportes, los resultados obtenidos este año son muy positivos y ha afirmado que la iniciativa “crea oferta de servicio de transporte regular en lugares que no la tienen y reduce costes porque se aprovechan mejor los recursos públicos”. Los cálculos que maneja el Ejecutivo regional apuntan a un ahorro de 10 millones de euros cuando las líneas compartidas estén completamente implantadas.