Anne Hidalgo, alcaldesa de París, ha anunciado que a partir del próximo 1 de julio se prohibirá la circulación de “los autobuses y camiones más contaminantes”, medida que se aplicará un año más tarde a los vehículos que generen más emisiones. Hidalgo ha explicado que está negociando con el Gobierno, que tiene competencias en el tráfico, para que las únicas excepciones sean las rondas que circundan la urbe y los dos bosques que hay al este y al oeste.
La iniciativa estará operativa entre las 8,00 y las 20,00 horas, incluidos los fines de semana. “No se trata de impedir circular, sino de impedir circular sin contaminar”, ha explicado la alcaldesa, que señala que “estamos determinados a actuar rápido porque la lucha contra la contaminación de partículas” de los motores diésel “es un gran reto sanitario”.